Hay a quien le gusta, hay quien odia la lluvia.
Pero el común denominador en esta ciudad es el caos. A la primera gota que cae, la mayoría de las personas -por no decir, todas- entran en un estado de pánico, histeria, prisa y negación, ocasionando un caos que desquicia la ciudad de México desde la primera gota, y horas después de que cayó la última.
Yo se que la ciudad esta mal planeada, que hay inundaciones, y que eso es parte de todo este caos, pero cada año, desde que yo tengo memoria, llueve. Y aunque de los últimos años a hoy, el clima a cambiado, siempre hay una época en la que la lluvia esta presente todas las tardes, a veces más fuerte, a veces más ligera, pero siempre pasa, cada año. Pero sin embargo, cada año pasa lo mismo, la misma histeria colectiva. No sabemos vivir con la lluvia. Aunque cada año, en esta época comienzas a ver paraguas e impermeables en todos lados, desde una esquina con un vendedor ambulante ofreciéndolos a precios muy accesibles, hasta en las tiendas departamentales más lujosas de la ciudad puedes encontrar estos artículos, indispensables para no mojarse y poder continuar con la vida cotidiana. Pero eso, en realidad no pasa. De todas maneras cada lluvia termina con el caos colectivo.
Cada año, los comentarios hacia este tiempo de lluvias se dan, y en su mayoría son negativos, desde mi abuelita, mi mamá, amigas y amigos diciendo "espero que este año no duren tanto", "ya me canse de ver llover", "me deprime esta época", "cuando va a parar", o otros como: "¡Acabo de lavar el coche!", "tenía que ir a equis lugar", "mejor no salgamos, nos vamos a mojar".
Y este último comentario me llama mucho la atención. ¿Por qué la gente tiene miedo a mojarse? De verdad, no se van a encoger. Es agua. Más o menos contaminada depende el punto de la ciudad dónde cada uno esté a la hora que lo agarre el chubasco, pero no deja de ser agua.
Cae la primera gota, y la gente acelera el paso, corren, y se tapan, o intentan hacerlo con cualquier cosa que traigan, desde el mismo suéter, un cuaderno, un portafolio y los que si contaban con un paraguas, con su paraguas. Pero todos, apresuran el paso. Los ves brincando charcos. Otros concentrados debajo de algún techo que los refugie de la lluvia, aunque casi siempre terminan igual de mojados, salpicados, etc.
A los automovilistas los ves que se desesperan, que el 99.9% no sabe manejar con lluvia, unos aceleran y creen que por ir más rápido, llegarán más rápido a sus destinos y no se mojarán, otros se apanican y bajan considerablemente la velocidad, y todo esto junto, genera ese caos que les he comentado. Aunque no se estén mojando. Aunque estén dentro de un auto, cómodos, con aire acondicionado, música y completamente secos. De todos modos al ver las gotas rebotar en el parabrisas, en el cofre de sus autos, ver como la calle se va cubriendo poco a poco de agua, entran en ese estado de histeria colectiva causado por la lluvia. Y todo esto, apenas en los primeros minutos de lluvia.
Pasan los minutos, incluso horas y no deja de llover. Cada vez vemos menos gente en la calle, la gente no sale de sus oficinas porque va a haber mucho tráfico, otros porque piensan que si se esperan diez minutos más, bajará la lluvia y se podrán ir. Y eso misma pasa en todos lados. Si alguien tenia que ir a un lugar, igual y ya no llega. Si alguien ya había ido, igual y no regresa o se tarda mucho, por esperar a que baje el agua, como coloquialmente dicen en algunos lugares.
La lluvia rompe con la rutina de muchos. Si en tu rutina del día esta ir a comprar un café, que ahora esta de moda, es probable, muy probable que ya no vayas, porque te vas a mojar. Si tenias que ir a la farmacia, tampoco fuiste. Al banco, pues puedes ir mañana, ¿O no? ¿Pero si llueve? ¿y al día siguiente vuelve a llover? La gente deja de hacer cosas que hacía cuando no llueve.
Son pocas las personas que tratamos de que la lluvia no rompa con nuestra rutina. La lluvia es parte de la vida. Cada año vendrá, en menor o mayor cantidad, pero habrá varios meses del calendario, que exista la probabilidad de que nos mojemos. ¿Y? No pasa nada en verdad.
Creo que tenemos un gran clima en México, aprendamos a vivir con él. Y no dejemos que el agua nos espante y se genere el caos. Como pasa todos los días que llueve.
Aprendamos a vivir así. Como en otros países lo hacen, con lluvia, nieve y condiciones climatológicas mucho más difíciles que las que tenemos aquí. Es agua, no pasa de que nos mojemos. Pero siempre podemos estar preparados y no dejar que la lluvia rompa con nuestra rutina diaria.
Foto tomada con el celular.
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