Monday, June 12, 2006

Oooee! Oe! Oe! Oeeeee!

¡Nos fuimos a vivir el Mundial!!!
Al Zócalo, de la Ciudad de México.



Y déjenme les cuento que fue una gran experiencia. Me consideraba primerizo, en la materia del futbol, nunca he sido un fan, pero en verdad que fue excitante haber vivido el partido México vs Irán, en el Zócalo de nuestra ciudad. En verdad, si el lugar por si sólo es impresionante. Verlo lleno de gente, sintiendo la vibra del mundial y a todos los mexicanos y no mexicanos que ahí estaban, todos unidos por una sola razón, apoyar a México.



Todo comenzó cuando yo, que soy cero futbolero, decidí dar un paseo por la ciudad mientras todo, bueno casi todo México, veía el partido en sus hogares, en la calle, o en algún restaurante. En mi paseo, decidí ir al centro de la ciudad. Las calles estaban vacías mientras avanzaba el de por si, vació Turibus por Reforma, la Condesa, etc. Cuando íbamos en el Turibus, el chofer aviso: "¡México metió gol! Vamos 1 - 0." Y poco más adelante, llegamos al Ángel, que se encontraba tapado por unas reparaciones, pero de todos modos ya estaba amurallado, granaderos y todo para protegerlo para recibir a los fans del fútbol. Todos vestidos de verde, blanco y rojo. Algo que me llamó la atención eran unos limpiavidrios en el edificio de HSBC, con todo y bandera colgados a medio edificio. Ya había unos reunidos viendo el fútbol en una pequeña pantalla sobre una camioneta de Televisa, todos ahí esperando lo mejor. El recorrido continuó y con forme nos fuimos adentrando al centro de la ciudad, se podía ver por las calles más y más gente con banderas, reunidos en grupos en pequeñas televisiones en locales, changarros, restaurantes, etc.



El turibus, llegó al Zócalo y ahí fue donde bajamos, después de un tranquilo recorrido con las calles prácticamente desiertas, para encontrarnos con un Zócalo lleno de gente, reunida frente a la pantalla gigante que el gobierno puso, a un lado de un escenario. Toda la gente, pintaba de verde el Zócalo, donde la bandera de México ondeaba con el aire. Fanáticos, gente que iba pasando casualmente, turistas, chamanes que hacen sus limpias y bailes, gente de partidos políticos, y hasta los del plantón que no puede faltar en el Zócalo, viendo el partido de fútbol. Mostrando toda esa energía por una misma causa, dejando a un lado las otras razones del porqué estaban ahí.


Tuve la oportunidad de subirme al escenario y estar frente a las pantallas atrás de la barrera de seguridad para poder acercarme y captar las expresiones de la gente viendo el partido. Fue algo realmente impresionante. Risas, emoción, y gritos cuando México iba ganando. Llanto, incertidumbre, seriedad, nervios, cuando fue el empate que logro el equipo Iraní. Y toda esa fuerza que se perdió unos momentos, se recobró cuando México marco su segundo gol. La gente se prendió, vibro, y grito de la emoción en el Zócalo, recuperaron el animo y las fuerzas, comenzaron nuevamente los cantos: "¡Ooooeee! ¡Oe! ¡Oe! ¡Oeeee!! ¡Oeeee!! ¡México! ¡México! En medio de brincos, abrazos, espuma que aventaban con unas latas, ruido de las matracas, trompetas y demás.



Después, baje del escenario y me coloque frente a toda la gente, viéndolos de frente, justo abajo de la pantalla, todos miraban directo a la pantalla y no les molestaba la presencia de cámaras frente a ellos, al contrario, saludaban, gritaban, pero no perdían detalle del partido. La emoción se mantuvo hasta el final. Pero poco antes, cayo el tercer gol. Y fue ahí cuando todo lo que se vivió antes, se repitió pero a mayor escala, la gente descansó, y tenían ya la seguridad del triunfo.



Al final, la gente bailo, brinco y festejo el triunfo, muchos se quedaron, muchos comenzaron a dispersarse, pero el ambiente era de fiesta. Una fiesta que vistió el Zócalo de verde y solo se escuchaba el ya tradicional: ¡Ooooeee! ¡Oe! ¡Oe! ¡Oeeee!! ¡Oeeee!! ¡México! ¡México!